bariloche

el sueño me cae como un calido rocío
¿que es lo que no puedo ver?
confundo las palabras
las cosas son solo una

se me ha dado la vida para que busque la pregunta
a la que mi incesante luz responde

recuerdo cada una de las caras talladas en el aire
todavía no estamos en el cielo
voy pensando y ya me pierdo
estuve sentado dudando temiendo
los autos que me miraban y gozaban de su espacio
ya me pierdo
el agua y sus tres apariciones me devolvieron las caricias
el trunco cemento
mi sangre nuestra herida

miro miro miro
trato fallo
puedo tocar mis parpados
y sentir mis ojos como pequeños huevos
de los que nacerán las aves de mis años
las que nunca veré
las que secan la tierra que trabajo

miraba por la ventana
y el verde me traía de vuelta,
la cuarta aparición del agua
el bostezo de las pequeñas olas
y las aves a mis espaldas volaban a la nada
cual nada?
esta
las cosas son solo una

caminé en los fríos adoquines
subí por el cemento
y caí de cara en el barro

acostado esperando
el sol calentaba el vino
y los rayos que esquivaban la cortina
me rozaban el cuello serenando los pequeños deseos
el vino, como copos de nieve
caía sobre mi cuerpo
sobre los cuerpos
-el frío sale de mis dedos-
miro mi niñez y el dulce misterio que significaba
miro mi vejez y el dulce misterio que significa
la noche se presentó cruzando la plaza
y a veces un rojo asesino
miraba entre las hojas secas
otra vez
moldear el abismo
con el barro de las palabras

alguien me mira
los pinos vencidos al otoño
se mecen sobre las casas bajas
me escondo detrás mío

la primera vez que estuve acá solo tenía ilusiones
la segunda mi cara era todo incertidumbre
y esta última
vengo a recoger los desechos

el cielo se desnuda ante mi
y achica los cerros
los refugios
su inmovilidad es la mía
mis brazos mis piernas
el cielo los refugios
no son míos
puedo imaginar detrás del cerro
alguien juntando leña
alguien hirviendo papas
en el cielo, detrás del cielo
¿qué imagino atrás del cielo?
ser todas las cosas