El silencio del Angel

 

Texto apócrifo atribuido al poeta laureado lux in tenebris,
 era desconocida, vibración baja


"no preguntarme nada. He visto que las cosas cuando buscan su curso encuentran su vacío. Hay un dolor de huecos sin gente. Y en mis ojos criaturas vestidas, sin desnudo!"








ahora paso los días
orando frente al río Paraná
orando para que no me abandone
mi corazón de pájaro








ahora ya no se
cuando dormí
y cuando no dormí
mis pensamientos
han sido reemplazados
por sueños


vos sos la madera
que el carpintero
rompe con su martillo
tu dolor te permite
transformarte


no escribo lo que quiero
escribo lo que debo
lo que le debo al…







pero si todo el tiempo es mío!
no os preocupéis
el tiempo es el espacio moviéndose
yo soy un trozo de espacio
con una molécula de tiempo adentro,
una piedra filosofal
que convierte el bronce en oro
lo malo en bueno



oh cristo
oh dios sin clavos
la ciudad negra
y el brillo de la herida
confundieron tus branquias
con alas
oh dios oh cristo desclavado
si en un instante se ocurre mi existencia
el dolor que corre
como un río de aguas profundas
es exorcizado por
esta maquina del tiempo
no hay perlas, cristo
en la sangre de los perros
tan solo hay una estación de servicio
abierta en medio de la ruta,
dos empleados mirando tele
y una mancha de aceite que refleja texturas


el silencio del ángel gris
el infierno se ha posado
en mi regazo



señor concédeme saber,
perdonar un sol muerto.
saber y perdonar
durante el tiempo




nunca jamás
un ángel
puede repetir
dos veces la misma palabra



si un ángel
dice cielo
nunca mas
podrá decir
la palabra cielo

así ha sido dispuesto
por el mas alto



si un ángel
dice dios
nunca más podrá
decir dios



hay tres categorías de ángeles
los dorados, los grises, y los negros


situación: un supermercado chino.
un anciano llora desconsoladamente
lo descubrieron robando un vino
y llamaron a la policía.
una señora desde el fondo
habla de los ángeles
pero nadie la escucha
un niño dice el huevo o la gallina
la cosa o la palabra

afuera un perro gigante
realmente gigante
babea manso en la vereda





todo un mundo adentro
de cada mundo
eso es lo máximo
que podemos afirmar

si un ángel aparece
en tu vida
no lo dudarás un instante

por el olor, 
por su forma de caminar
y por otra cosa
que no podemos decir





aunque parezca gracioso
yo, por mi parte,
tomo mate en la vereda


un ángel negro
es fácil de reconocer
por las arañas en su cabeza


los ángeles dorados
son los ángeles mudos












estas dispuesto
a que nunca más
nadie conozca tu nombre?
ser un errante desheredado
el de los ojos brillantes de sol




vino un pájaro del desierto
y trajo el mensaje
serán agrupados
por distintos grados de soledad




ángel mudo
que vienes con el sonido
del ventilador

ah cristo sin clavos
tu dulce aliento
guarda el secreto




algunos sabios pensaban
que el cielo era un gran espejo
y el cosmos un reflejo de su mente




maría magdalena
prostituta bíblica
llevas el mismo nombre
que la madre de dios







desde afuera
mi cuarto
se ve iluminado
pero no hay ninguna luz prendida
el poema se alimenta
de resplandores



la luz que viene
del ventilador
mientras en un sueño
el mundo es comido
por una gran serpiente





cuando fueron separadas
las aguas superiores
de las aguas inferiores
fue el diablo
quien mostró su desnudez





















dícese del agua
dícese del fuego
dícese de la tierra
dícese del agua
dícese que conforman las manos
de quien escribe estas líneas
desde una cueva
húmeda y sanguinolenta.
desde lo alto se escucha el canto
de los lobos
pero no hay peor canto
que el que no se puede oír
¡existen ángeles mudos!
y es el precio que hay que pagar
por la traición
porque las cuevas tienen entrada
pero no salida (…ilegible…)
y todo lo que no es traición
es soledad
que proviene de sol
y una mente
y un cuerpo
y algunos lobos muertos
en la entrada de mi lecho






nunca se termina
de desangrar
el monstruo herido
que vive en mi vientre


el mal cae
como una lluvia plateada
y yo noto
que toda el agua
forma parte de lo mismo




perdí tantas cosas
junto al mar
desperté y vi
un cangrejo escapar
vivo de una olla hirviendo




hombre alto
que tanto me has mirado
si ya no recuerdas mi nombre
como es que sigues incendiando




Juan de Arimatea
en la tercera madrugada
de la gira
le promete a Nicodemo
que le va a escribir
cuando esté en Canadá



que un angel
sea mudo
no significa
que uno no pueda escucharlo
no tiene nada que ver



(a quien quiera ver ángeles)
cuando llegue el momento
que estés más cerca
del final que del principio








la luz que reposa
detrás del pensamiento
llueve toda la mañana
en la ciudad de rosario





una cascada
entre lo que se dice
y lo que escuchamos






solo yo se
cuanto tiempo
estuve velando
al ultimo muerto,
ya no sentía el olor a podrido

Adios
esta vez no vas a resucitar