miércoles, abril 17, 2013





I

llegué hasta acá

siguiendo un brillo
entonces olvide
desde donde ataca
el pajaro de sombra
que con serpientes
une las cosas de este mundo


II

ofrendo mi delirio virgen

ofrendo la niña que paseo de la mano
la niña que tropieza y lastima su rodilla
en la vereda cuando cae la tarde.
no es nada hija mía, no es nada
un nuevo día vendrá
volverán a gritar los arroyos
comeremos arañas otra vez


III

el hombre volverá

tomará la cena
lavara su cuerpo
yo no recordaré que estoy acá


IV
este poema ya fue escrito
quién lo escribió ya está muerto
quién lo escribe no puede dejar de hacerlo
mi latido
el único libro sagrado

1 comentario:

roma m dijo...

qué bueno eso de "mi latido/el único libro sagrado" y todo el III