martes, abril 05, 2016

Naufragio II

un poema es el relato
de un relato
el sol alumbrando
una capilla destruida



cuando me voy
quedan atrás mío
un león muy triste
lamiendo un charco
un reptil hecho de amor
que lleva en sus ojos
el cielo



cuando me voy dejo
un cielo furioso
del color de la sangre
cuando baña la tierra seca




al costado de la ruta
se incendiaba un bosque
al motorista
se le nubló la visión
con los arboles de fuego



al llegar
el único dios posible
era la línea del horizonte
perfecta como la imaginación
simple como pedir ayuda




y el mar azul
ay por todos lados
el mar azul



no miento si digo
que perros marrones
me despertaron con su lengua
 cada mañana
no miento si digo
que una gran tortuga
salió del mar
para mostrarme su coraza
mientras mi espalda
se quemaba casi viva



hubo un día
que un sol emergió
desde las aguas
y yo quise beberlo
hay días de los que
solo recuerdo
estar hundiéndome
en el océano azul



un poema es el relato
de un relato
el sol es para todos
la sombra para algunos


como ese ojo
cuya pupila es el mundo
en el que viví hasta hoy
en el que siempre
empiezo de vuelta
en el que cada vez
las tardes son mas largas
las tardes son mas suaves





desde ahora que
solo hablo por mi voz
la voz que ha sabido
tomar otros cuerpos




rezo en lo que creo
no me equivoco
pesco en silencio
pesco en el silencio
la ultima tarde
el sol besó la tierra
unos minutos despues
ya no estaba




he coincidido en
no besar mas
la palabra en
que transmuto



me tiembla el ojo
el que tengo
y el que vivo



todas la noches
como arroz
como una manera
de entender la poesía




el anciano
del verbo filoso
que puede cambiar
el color del cielo




me levanto
a las seis de la mañana
como una manera
de comer arroz




a la mañana
me despierta tu imagen
a la tarde
apuesto mi vida
supe de un ángel
que bajó al infierno





hacer un poema
hacer un silencio
es tan fuerte mi deseo
es tan fina mi corteza





cuando te ahogas
lo primero en que
perdés fuerzas
es en gritar




pense que me ardía
pero me estaba curando
¿el poema de quien
estoy continuando?






solo los dioses
conocen la existencia
de otros dioses




sabiendo el eterno
naufragio de los astros
entrando y saliendo
del cosmos
que fluye como el agua
y traga casi todo




a veces pasa un avión
y yo pienso
que me ven




en la vida de
empezar de vuelta
en la vida de
todo es empezar de vuelta
me clave un clavo
en el medio de la flor




cuando comience mi era
cuando quite estos cuerpos
de sus cuerpos:
de todas las heridas
aún conservo la inmortal



entonces dijo
en mi vida
la reina es
la hija de
la princesa
y yo
soy solo un soldado


hubo alguien
que llenó de luz
el sonido de las palabras
al caer en este mar
entonces empezó todo



si pienso al mismo tiempo
que el tiempo
se que alguien
vendrá a rescatarme



desde mi lengua
vomito litros
de sangre de luz
hacer un poema
encontrar un sitio virgen
una cueva en la que jamás
entro ningún nombre
un silencio que no puede tener
ni comienzo ni final




me quise volar la cabeza
para alcanzar el pensamiento
pero un árbol es un árbol
y un pájaro es un pájaro



era hermoso
como un poeta
brillaba como
el sol
persiguiendo claridad
encontró serenidad



vivo en un segundo
que dura mil años
me laten los ojos
de tanto mirar la luz



se me llenan
los días de vida
soy un indio
sudamericano
la panza
es por tomar caña
la sangre en la memoria
por la herida
que resplandece
y nunca
será curada





si hay sol donde antes
hubo sombra es porque
pasó el tiempo, dijo
el que dormía bajo un árbol



en medio del mar
encontré una roca roja
donde viví durante
un tiempo
luego estaba corroída
por el viento y el agua
luego era mi alma
luego se hundió


el perro ladra
cuando ve
que se mueven
las sombras
me gusta llamar
a los perros
por su nombre




cuando me crucificaron
sentí el olor
de mis axilas
y era igual a cuando
dormías en mis brazos
fue la primera vez
que te recordé


besé tus pie
y luego vomité
en un río
de aguas cristalinas
al despertarme
todo era un sueño
incluso despertarme



tengo que apurarme
antes que se interponga
la noche
entre el mar y yo









mis ojos deshidratados
de tanto no llorar
bajaron a mi cuerpo
cansado de tanto temblar
hoy que acepté el futuro
hoy que volví a ver



de tanto beber  la luz
se me iluminó
la garganta



a la noche duermo
como un perro adolescente
y sueño que les digo  todos
-esto es un sueño, yo no estoy acá



estuve tan cerca
de los tiburones
no podía ver el cielo


tiburón tigre
germen de luz
nado por el aire
respiro un sol bebé


cielo inmortal
tus nubles
mas blancas que la espuma
son los huesos
de aquel que ya se fue









el sol hierve
los ríos de sangre
que fluyen por mi cuerpo
la sangre sangre
la madre no nacida



primero fui una luz
luego una sucesión de imágenes
luego un manto de palabras
(nunca alcancé a tener nombre)



nunca más volví
a ver la luz violeta
desde que me dormí
sobre ella
desde que vi
su cuerpo ciego
fluyendo desde mi sien



hay un pájaro dorado
en mi cabeza de fuego
escribo en un sueño
escribo que escribo



el ojo mira
la imagen
el ojo es
la imagen
quiero decir
el viento helado
que llega a mi memoria
el sudor en la frente
que quema el pensamiento



todos los días
se termina
la cerveza
ya casi
no sale humo
de mis pulmones


cuando coincide
la realidad
con las palabras
que se decir






yo estaba borracho
en este mundo
hay pájaros gigantes
que cantan:
sus cantos son
gritos de auxilio



no crees que
tu alma es vieja
como un pájaro cantor
y hermosa como
el alba en una flor?



bien de mañana
como polenta en una ronda
luego entro al mar
y mis ojos son espejos



para ser
hombre de sed
debo tragar
el sol rojo envenenado
terminar este relato
que no es relato
sino mi sangre



vomito un espejo
olvido mi cuerpo
flotando en el mar
no despierto
ni en el segundo día






si es una luz
volverá a brillar
lo que guarda
el corazón



naufragio que
el día de la mayor
tormenta que recuerde
el día que caían
soles fríos y yo
no tenía nada
ni un tronco
del que aferrarme
llegué hasta tu casa
como un príncipe mendigo
y me dijiste
pasá
pensé que eras un perro
toma una ducha
tomá ropa seca
en la olla hay comida
yo no lo olvido



madre me llamas esta noche
que duermo frente al mar
a kilómetros de cualquier hombre
con un cuchillo junto a mi lecho
me llamas en un sueño
cuando estoy escuchando las olas
muy cerca de las estrellas
y despierto llorando pensando
en tu amor puro y blanco
como nunca he conocido




me fui como quien se va
despacio sin dejar rastro
abriendo el cielo con la mirada
esperé  como quien espera
sentado frente a la nada
como un niño iluminado
como un animal ciego
me bañé en soles mas fuertes
conocí aguas mas limpias
un día quité la sed
de un caballo que
vagaba solo por el mato




los seres del día
nacen en la noche
hoy que encontré
un  hijo
y la luz blanca
entra a mi casa
inundando la ventana



solo dios sabe
cuanto te esperé
confundí tanta sombra
con tu cuerpo



llego a tierra
sin despedirme de nadie
doy a luz
y vuelvo al mar



vi un reptil ardiendo
cuando fui parido por el mar
vi un reptil ardiendo
y toqué su sangre fría
con mi cuerpo de fuego
vi un reptil ardiendo
y tuve mucha fiebre
y tuve mucha sed
vi un reptil ardiendo
entregué mi corazón
y me lo devolvieron








cuando el
deseo es ciego
brillan los ojos
en la noche

los no nacidos
vienen con la lluvia
tocan la madera
en un sueño

un niño llora
un perro ladra
cuando el deseo es ciego

la cosa no es conmigo:
brilla la luna en las aguas

luego
al igual que un pez
escucho la lluvia
adentro de la tormenta


2 comentarios:

Anónimo dijo...

este mundo es un error. todas las decisiones y las palabras son erróneas. y vos, una certeza inmutable.

Anónimo dijo...

para mi, debajo de las cosas, están las cosas.
como un rio sub terrestre del que emana la verdad
de mi nacimiento hasta mi muerte solo persistirá tu nombre, tu rostro, tus manos y tu beso tierno.